jueves, 2 de mayo de 2013

1 De mayo en Estocolmo; Frihet och solidaritet



    Un día después de la tradicional quema del invierno, en que se prende fuego a lo viejo en la Venecia del norte, recordando las tradiciones paganas del pasado, con alocadas danzas y ríos de alcohol desfilando entre los mas jóvenes asistentes al rito, bajo el clima aun frio de la primavera, amanece la ciudad con un primero de mayo luminoso, cálido, con solo una leve brisa fría como recuerdo del duro invierno que vistió de blanco por largos meses la hermosa ciudad de Estocolmo, una ciudad cosmopolita por excelencia, donde en relativa armonía conviven personajes diversos, de pueblos, tradiciones y religiones antagónicas, donde se puede encontrar vino chileno, dulces naranjas egipcias, condimentos árabes o fideos chinos en los mismos establecimientos que venden productos locales, atendidos por hermosas chicas que parecen sacadas de revistas de moda. Es que  todo brilla en el sol de primavera, mientras en Medborgarplatsen las multicolores banderas con consignas socialistas y no tanto se agrupan, entre otras que representan colores de patrias lejanas, sobre las cabezas de los ya miles de asistentes a la reunión, que conmemora la cruenta masacre obrera de Chicago, en la que una bomba fue arrojada matando a un policía e hiriendo a otros, solo para recibir como respuesta el fuego armado, asesinando a mas de cuarenta obreros, el 4 de mayo de 1886. Como consecuencia de este hecho el estado resolvió culpar de la masacre a 8 dirigentes obreros, que fueron condenados a la orca. George Engel, Samuel Fielden, Adolph Fisher, Louis Lingg, Michael Schwab, Albert Parsons, Oscar Neebey y August Spies, quienes luchaban por el respeto de los patrones a la jornada laboral de 8 horas.
         127 años han pasado desde estos funestos hechos y la gente se reune en Medborgarplatsen, preparándose para marchar hasta Gamla Stan, la ciudad vieja, donde se reunirán y escucharan o gritaran consignas acerca de la libertad o repudio contra desconocidos dictadores que subyugan a lejanos pueblos, lejanos, pero que sin embargo están cerca, ya que muchos se han refugiado en  Suecia para intentar de algún modo continuar con sus vidas, por eso no es extraño encontrar tanta solidaridad entre los pueblos que son en realidad el mismo pueblo, ya que a fin de cuentas, un día como hoy recordamos que somos todos ciudadanos del mundo, obreros y que  la Tierra es la única madre para todos.
       Es importante recalcar que en estas latitudes la marcha se vive de una forma distinta, recordando tambien que el 14 del mismo mes, hace 82 mayos   cinco obreros que realizaban una manifestacion pacifica fueron asesinados por militares en  Frånö Folkets ParkÅdalen, por lo que el dolor lleva a marchar muchas veces en silencio, recordando que en estas tierras como en tantos otros lugares los obreros tambien han sido masacrados.
          En latinoamerica en cambio las marchas se acompañan por desordenes y saqueos, por grupos de encapuchados que empañan el acto, mientras la policía dispara criminalmente balas de goma o de pintura a las caras de quienes destruyen y quienes no. En oriente medio las policías actúan de forma aun mas criminal, disparando a quema ropa hasta los grupos de asistentes, creando viudas y martires de los movimientos sociales que crecen junto con la desigualdad, mientras en Estocolmo la marcha todavia discurre con facilidad entre las calles, solo se lanzan consignas, solo se disparan gritos y la policía solo resguarda que el trafico no afecte a los marchantes, mientras el sol tiñe las paredes de los pulcros edificios y las flores del cerezo comienzan a abrirse a la primavera.
        Se ha probado en el llamado tercer mundo que sin desmanes no llegan los medios y sin ellos las pancartas no aparecerán en los diarios y televisión, hacienda las manifestaciones inútiles, pero acá un gran sentido republicano se deja ver en todo su esplendor mientras los comunistas, los inmigrantes, los obreros, anarkistas, grupos de liberación animal y de apoyo a los indígenas caminan sin estorbarse, solo con aires de solidaridad y participación, para alzar su voz hacia un sentido humano, luchando por necesidades que el pueblo de Suecia directamente no comparte, pero si que sufre al saber que lejos de sus fronteras la desigualdad supera en demasía los limites que la moral y la cordura pueden aceptar, porque a pesar de tener una economía fuerte, un sistema social excelente, un acceso a la educación notable o un bellísimo sistema de transporte las noticias vuelan y la comunión con otros pueblos determina la capacidad de reacción y de conciencia con lo que pasa donde el mundo aun se mantiene mas oscuro.

1 comentario: